12 abril 2008

TQ

La tarde que prometía sol se ha tornado extraña. Cuatro gotas de lluvia anuncian una tormenta que seguramente será insuficiente.
El perro de la casa de a lado está callado. Sólo se escucha silencio. Silencio, respiración y tus latidos al apoyar mi cabeza sobre tu hombro izquierdo. Rota la distancia prometida, a dos centímetros de tu boca, dos palabras sorprenden a mis oídos, esas mismas que minutos antes descifraban mis ojos al pronunciarlas tu mirada... De nuevo silencio.
Sonríes. Sonrío. Ahora es mi diástole la que apremia.
Cuando el sentimiento es real no necesita de logopedas el corazón.

Imposible dormir... Yo sólo quiero...


[ Rebeca Jiménez ] (gracias teresa)

1 Comments:

At 2:03 p. m., Anonymous Anónimo said...

Gracias a ti, Kiu. No sabes lo bien que se est� por aqu�. Me estoy convirtiendo en una asidua a tu blog.

Un beso fuerte
Teresa

 

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