28 agosto 2006

Buscando...

He abierto todos los cajones. Llego tarde y no la encuentro... han aparecido algunas cosas que ya no recordaba que estaban ahí, revueltas entre otros trastos, recuerdos mezclados con fotos de otra yo que me han hecho perder media hora dificultando aún más la búsqueda. Todo está desordenado, nada en su sitio. Un día de estos tengo que dedicarme a poner un poco de orden... pero es que siempre voy tan aprisa. Cada noche suelo dejarla sobre la mesita, junto a la cama, y por la mañana, justo en el momento de cerrar la puerta de casa, me la coloco. Así todo parece perfecto. No quiero que me vean y me pregunten: «¿dónde te la has dejado?», o alguien acierte a decir: «a ti te falta algo». Sigo buscando.
Es necesario que la encuentre... no puedo andar por ahí desvestida de ella, desnuda sin un disfraz que camufle lo que no quiero que vean, sin esa parte de mi con la que agradecer cualquier buen gesto o espantar lo que no me gusta; la necesito para intercambiarla cuando alguien me ofrezca la suya o simplemente para convertirla en carcajada si la ocasión lo merece.
Voy arriba y abajo creyendo encontrarla en cada rincón que descubro finalmente vacío. He mirado debajo de la mesa hallando sólo cuatro hojas arrugadas, tatuadas de tachones, con lo que intenté escribir hace dos semanas; lo leo... así es imposible! Quizás si pongo su canción me recuerde la última vez en que hice buen uso de ella... suena una melodía acompañada de una voz distorsionada por una pésima grabación casera... pues no, no funciona.
He abierto todos los armarios. Llego tarde y no la encuentro... Me doy el último toque en el espejo, así será más fácil disimular su ausencia, cojo el bolso, la chaqueta, las llaves, salgo a la calle... y ahí está!

Ayer, al parar delante de la puerta, en un pequeño receso antes de entrar, entre un suspiro y un parpadeo, la olvidé tirada junto al felpudo que da la bienvenida a casa. No la eché de menos al apoyar la cara sobre la almohada, ni siquiera tras el último bostezo. Se ha pasado ahí toda la noche... y está perfecta...


25 agosto 2006

Over the rainbow


Somewhere over the rainbow skies are blue...
And the dreams, that you dare to dream, really do come true





Al escuchar de nuevo esta canción, me ha venido a la memoria algo que escribí hace tiempo:


Son només set colors, reflexats en un dia plujós
dibuixats d'una a altre banda d'un paisatje nublós
com un pont al cel construit amb llums de colors
com un somni de tendressa ke fa bategar els cors

No es més que un efímer quadre d'estil impresionista
impossible es al tacte i molt agradable a la vista
passarel.la que els angels fan servir amb destressa
de les ments somiadores i voladores travessa

Allà al cel es deixa veure majestuós i espectacular
quan la pluja i sol brillant creuen un destí similar
de ben agraits es parar el pas i poder contemplar-lo
empressa difícil pujar dalt o amb les mans agafar-lo



La traducció sería más o menos esta:

Son sólo siete colores, reflejados en un día lluvioso
dibujados de un lado a otro de un paisaje nubloso
como un puente al cielo construido con luces de colores
como un sueño de ternura que hace latir los corazones

No es más que un cuadro efímero de estilo impresionista
imposible al tacto y muy agradable a la vista
pasarela que los ángeles hacen servir con destreza
de mentes soñadoras y voladoras "travesa" (de atravesar)

Ahí en el cielo se deja ver majestuoso y espectacular
cuando la lluvia y el son brillante cruzan un destino similar
de bien agradecidos es parar el paso y poder contemplarlo
empresa difícil subri arriba o con las manos cogerlo


23 agosto 2006

En dos canciones...


Hoy es uno de esos días en que a ratos veo las dos mitades del vaso...
Uno de esos días en los que mirar cada uno de los lados de un dado trucado de seises no compensa.
Porque todo es relativo... y cada instante uno más.
Es curioso como, en mi caso, la facilidad innata (y heredada) de "dar vueltas a las cosas" es inversamente proporcional a la capacidad para plasmarlas coherentemente.
Vuelan por mi cabeza infinidad de razones por las que enlazar letras pintando palabras en este pequeño rincón... y ninguna es lo sufientemente compacta. Así que mejor...


Te lo cuento con música:


Es caprichoso el azar [ Serrat y Noa ]



No te busqué, ni me viniste a buscar
tú estabas donde no tenías que estar;
y yo pasé, pasé sin querer pasar.

Y me viste y te vi entre la gente que iba y venía
con prisa en la tarde que anunciaba chaparrón.

Tanto tiempo esperándote... Fue sin querer...
es caprichoso el azar.

No te busqué, ni me viniste a buscar
tú estabas donde no tenías que estar;
y yo pasé, pasé sin querer pasar.

Pero prendió el azar semáforos carmín,
detuvo el autobús y el aguacero hasta
que me miraste tú.

Tanto tiempo esperándote... Fue sin querer...
es caprichoso el azar.

No te busqué, ni me viniste a buscar...



Cuando no estás [ Ana Torroja ]



Si pudiera abrazarte cuando te echo de menos
si tuviera un instante de ti...
llenaría el vacío que me duele por dentro, amor
si tuviera un instante de ti...

Y si fuera verdad que la distancia es el olvido, abandonar
dime entonces porqué, porqué suspiro con cada latido
cuando no estás... cuando no estás

Si pudiera traerte con la ayuda del viento
si tuviera un instante de ti...
calmaría el deseo que me quema por dentro, amor
bastaría un instante de ti...

Y si fuera verdad que la distancia es el olvido, abandonar
dime entonces porqué, porqué suspiro con cada latido
cuando no estás... cuando no estás


17 agosto 2006

Ya se ha marchado...


Ya se ha marchado... olvidando en la puerta dos suspiros
me ha dejado tres silencios bajo el techo suspendidos,
cuatro caricias suaves durmiendo sobre mi almohada
y una sonrisa triste, quebrando en llanto, desconsolada

Ya se ha marchado... aireando un tercio de su perfume
blandiendo medio adiós que a mi paciencia consume,
un cuarto beso fundido en abrazo capaz de enmudecer
y he leido en su mirada la quinta posibilidad para volver

Ya se ha marchado... construyendo de nuevo mil dudas
generando cien preguntas de respuestas desnudas,
diez razones alineadas en fila india para querer escapar
y un millón de motivos para suscribirse al verbo amar


Soy... sinceramente suya...



Sinceramente tuya

«No escojas sólo una parte, tómame como me doy,
entera y tal como soy, no vayas a equivocarte.
Soy sinceramente tuya, pero no quiero, mi amor,
ir de visita por tu vida, vestida para la ocasión...
»

[ Pasión Vega versionando una de las mejores letras de Serrat ]

13 agosto 2006

Y volo...


Ella un día desplegó sus alas
y él no quiso aprender a volar
le mostró un universo de sueños
y él no supo dormir y soñar

Así que emprendió su vuelo
sin un destino concreto
partió buscando horizontes
y él quedó indeciso en el puerto

Sin rumbo, sin mapas, sin quizás
desnuda de dudas y lamentos
viajó a otras pieles que sudar
sin amor ni verdad ni sentimientos

Vacía pero viva a la vez
recorrió mundos no explorados
vendió labios en saldos de querer
y se cobró los abrazos no dados

Giró los grados precisos
voló como sólo sabe una gaviota
aprendió del amor sin amar
y a él cobarde lo llamaron idiota

Ella ahora busca ciega su mirada
en otros ojos que contemplar
él quedó huérfano en el muelle
solo en un banco llorando al mar


«Cuéntale a tu corazón
que existe siempre una razón
escondida en cada gesto...
Nunca es triste la verdad,
lo que no tiene es remedio»


[ Sinceramente tuyo - Serrat ]



Te lo cuento con música: Both sides now - Joni Mitchell


Estado: inspirada / Resultado: nada

07 agosto 2006

Gira... Gira... Gira...


Ayer volví a embriagarme de rojo y verde por "enésima vez", he perdido ya la cuenta de las que son. Y cada vez descubro algo nuevo... y cada vez vuelvo a llorar en el mismo preciso instante.


[ un diálogo ]

Amelie: Esa chica del vaso de agua, si parece ajena quizás esté distraída pensando en alguien.

Dufayel: ¿Te refieres a alguien del cuadro?

Amelie: No, quizás en en un chico con quien ella se cruzó y le dio la impresión de que los dos se parecían.

Dufayel: Osea, que ella prefiere imaginarse una relación con alguien ausente que tener una con los que están a su lado.

Amelie: No sé, quizás sea lo contrario y ella se desvivió por arreglar la vida de los demás.

Dufayel: ¿Y de ella, de todos los desarreglos de su vida, quién se preocupa?


[ una escena ]



Algún día alguien bajará a comprar canela en rama,
mientras yo preparo un rico pastel de ciruelas...


[ un experimento ]

Una melodía... «Sur le fil» de Yann Tiersen (por ejemplo)
Una silla... de esas tipo oficina, con ruedas
Un techo... sobre el que fijar la mirada
Un pensamiento... positivo o negativo, da igual

Impulso y ... GIRA... GIRA... GIRA!!!

Si al frenar no esbozas una sonrisa,
o una lagrima no brota de tus ojos...

...es ke estás muerto.

Si aguantas hasta el final y consigues hacer las dos cosas a la vez...
es ke estás tan loco/a como yo... o no... en cualquier caso, es divertido!



[ y unas frases ]

«La angustia por el paso del tiempo nos hace hablar del tiempo que hace»

«Sin ti las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de las de ayer»

«La vida no es más que un interminable ensayo de una obra que jamás se estrenará»

«Cuando un dedo apunta al cielo, el tonto mira el dedo»



[ Nota para ajenos: clickando en los subrayados... hay sorpresa ]

04 agosto 2006

Bienvenida a casa


Hoy he contado por lo menos ocho... dieciseis orejitas que apresuraban su paso hacia un lugar seguro al escuchar el estruendoso sonido del motor de mi diesel desapaciguando la traquilidad que seguramente les proporciona la noche. Siempre andan por ahí, a esas horas, las tres y cuarto de la mañana según marcaba el reloj del panel electrónico de mi coche. Ellos nunca "llegan tarde", como el de Alicia. Salen al borde del camino... imagino que a comer un poco de hierba, tomar la fresca y quizás contarse batallitas acontecidas a lo largo del día: «¿Sabes Rabbit? hoy cuatro mocosos humanos encontraron divertido liarse a pedradas contra mi madriguera...». Reduzco la velocidad, comparto la mirada con el asfalto y los observo mientras ellos, temerosos, emprenden la huida.
Van de dos en dos, en pareja como mínimo... Es curioso verles correr cuando los focos los iluminan, dando esos saltitos que los caracterizan y que a mi me parecen de lo más gracioso. Me gusta porque me hacen sonreir... y eso en ocasiones es tarea difícil. A veces, algún valiente oportuno desafía mi llegada sin moverse del sitio, moviendo el hocico y los bigotes como aquella embrujada de los sesenta. Entonces me entran ganas de parar el motor, bajar lentamente y acariciar su lustroso pelaje grisáceo. Pero nunca lo hago... se que en cuanto ponga el pie en el suelo, menguará su valentía y correrá a la búsqueda de un rincón en el bosque donde esconderse. Yo no llevo piedras, pero eso él no lo sabe.
Son esos momentos (la Luna y alguno que otro más) los que me hacen sentir el privilegio de vivir a las afueras y tener que conducir unos cuantos quilómetros en la noche de vuelta a casa. Hoy estuve en el centro, con unos amigos, de concierto (Maika Makovski, genial), en esa sala que frecuento tanto últimamente... a la hora de la despedida alguien me preguntó «¿Y no te da pereza tener que ir ahora hasta tu casa?». Pues a veces sí. Pero si después de unos cuantos minutos de carretera eres capaz de disfrutar de semejante recibimiento de vuelta... incluso se agradece.


«Volveré temprano, respira tranquila.
Cuando los demonios sanen tus heridas
no habrá que buscar ni luz ni aspirinas»


[ Volveré temprano - Ismael Serrano ]



Te lo cuento con música: Good Bye Alice in Wonderland - Jewel


Estado: satisfecha / Resultado: equilibrio