Sin tregua

Ya se han vuelto a pelear... Nunca han sido buenos amigos y cada uno lucha por conseguir lo contrario de lo que pretenda el otro. Poco tiempo les dura la tregua. Hoy ganó la que fabrica razones al que alterna sístoles y diástoles. Ella es más perseverante y su principal arma es la cordura; nunca le falta razón, aunque en ocasiones carece de respuestas. Él, aunque débil, bombea misiles de fuerza, locura y tenacidad; a veces se cree valiente. Cuando uno se duerme el otro aprovecha la ocasión para atacar. Nunca me han gustado las trampas, pero en esta guerra todo vale. Es un duelo de titanes donde el vencedor no disfruta de su victoria y el vencido tarda en recuperarse. Son adversarios de un mismo juego en el que la que siempre acaba perdiendo soy yo. No se llevan bien... Es imposible hacerlos mirar hacia el mismo lado y, sin embargo, no pueden vivir el uno sin el otro.